Hoy un recorrido corto pero espectacular desde el hotel hasta el Glaciar Kaunertal. Como muchas carreteras de alta montaña, ésta está sujeta a peajes. Y por ese dinero nos hubiera gustado una nueva superficie de asfalto. Por momentos todo el asunto resulta un poco accidentado. El viaje llegó hasta los 2750 m; la única manera de subir más alto era con la góndola y eso habría excedido nuestro presupuesto. Si quieres disfrutar de la fantástica vista, debes echar un vistazo a las distintas WEBCAM durante el día (hora local). Google ayuda mucho aquí. Después de un montón de “hot love” (helado de vainilla con frambuesas calientes) volvimos al hotel.
